La campaña “Manos a la olla” se adaptó a la emergencia para asegurar el funcionamiento de las ollas comunes en las zonas más vulnerables de la ciudad. Las acciones comprenden el apoyo temporal con miras a la autogestión de estos espacios. La recuperación de alimentos permite dotar de raciones a una gran cantidad de la población.
34,967
raciones entregadas
76
ollas comunes capacitadas
83
asentamientos humanos